Como matrioshkas, una dentro de la otra…

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“Todos cargamos memorias ajenas, la mayoría de ellas ni siquiera nos fueron ofrecidas, nunca las aceptamos, se adosaron a la nuestra y las cargamos sin poder distinguir la nuestra de la ajena. En las infinitas capas de la memoria hay escrituras que no nos pertenecen, que otros escribieron, y así, un buen día, con terror nos damos cuenta de que estamos tarareando una canción que no conocemos, que hay otro en nosotros que la entona; que hay un olor que nos recuerda otro olor jamás percibido, que hay una culpa que no nos pertenece; que difícilmente somos capaces de distinguir, en las capas de la memoria, nuestra propia escritura de la escritura ajena.” (García Canal, 2002)

El conocimiento es “adquirir información valiosa para comprender la realidad por medio de la razón, el entendimiento y la inteligencia”, es siempre cultural y se puede transmitir.  Solemos asociarlo únicamente con lo que aprendemos en la escuela, en los libros, incluso en nuestros maestros, como si el conocimiento científico y académico fuera el único o el más importante. Aunque agradezco mucho el que he aprendido a través de este método, hoy les voy a hablar de aquel conocimiento que aprendemos de maneras más sutiles, en el día a día, a veces sin siquiera tener la intención de aprenderlo.

“El conocimiento más que ser construido por el niño, es co-construido entre el niño y el medio sociocultural que lo rodea” (García González, 2000). Es irónico que estemos bajo un sistema patriarcal cuando las mujeres son las que guían y orientan muchas de las costumbres dentro de las familias y esas costumbres son las que moldean los conocimientos.

Ese conocimiento más cotidiano que aprendemos a través de la familia, de las mujeres en nuestras familias. Esa vocecita interna que te hace recordar que antes de salir debes de llevarte un suéter porque puede llover; aquella que te dice cuándo es el momento justo en el que se cuece la pasta, aunque no sea el mismo que dice la caja; o la que te ayuda a decidir qué hacer cuando te peleas con tu novio. Todos son conocimientos valiosos y únicos porque hubo alguien ahí que te ayudó a situar ese aprendizaje dependiendo tus experiencias, porque esa vocecita interna se cultivó a través de las enseñanzas, consejos y guía de nuestras madres, abuelas, tías.

Sabían que hubo un momento en el que estuvimos dentro de nuestras mamás, pero también dentro de nuestras abuelas maternas. Los fetos femeninos empiezan a producir óvulos y alrededor del quinto mes de gestación ya cuentan con un impresionante número: alrededor de siete millones de ovocitos. Cuando las bebés nacen ya cuentan con los óvulos que tendrán a lo largo de su vida; tres generaciones conviviendo al mismo tiempo, habitando el mismo cuerpo.

Es un lazo poderoso que se extiende mucho más allá del periodo de gestación. Puedo decir que cuando era pequeña adoraba pasar tiempo con mi abuela materna (que por cierto fue la única que pude conocer), y escuchar las historias que contaba acerca de ella misma, de mi madre cuando era pequeña, de mis tíos, de personas que realmente nunca conocí pero que son mi familia y me acompañan.

Esas historias me transmitían conocimientos maravillosos y algunos otros que en su momento no tenían mucho sentido, pero ahora que he crecido me han servido mucho. Con el tiempo, he aprendido también a escuchar a mis tías, mis primas, mi hermana y sobre todo a mamá. De alguna forma, siento sus experiencias mías, tanto de las que estuvieron antes que yo y las que me acompañan día a día, aunque no las haya experimentado yo misma, me han ayudado a construir conocimientos de todo tipo, desde tips tan simples sobre cómo usar un enchinador para pestañas, cómo escoger aguacates hasta cuestiones más profundas sobre el concepto de feminidad o cómo aprender a cuidar mi cuerpo y cómo relacionarme con los y las demás.

Estos tips, estos consejos, esas lecciones que me enseñan y que llegan a mí a veces un tanto sesgados o debo decirlo, no siempre son los más acertados, me han ayudado a construir la persona que soy hoy.

 

Fuentes consultadas:

  • García, E. (2000). La construcción histórica de la psique. México. Trillas. 144p.
  • García, María I. (2006). El espacio de la locura como experiencia en Espacio y poder: el espacio en la reflexión de Michel Foucault. México: Universidad Autónoma Metropolitana (UAM-X), pp. 41-50.

https:/ www.bebesymas.com/embarazo/el-feto-empieza-a-fabricar-ovulos-desde-las-nueve-semanas-de-gestacion#:~:text=Despu%C3%A9s%20de%20nueve%20semanas%20de,que%20reciben%20los%20%C3%B3vulos%20inmaduros

https://www.significados.com/conocimiento/#:~:text=El%20conocimiento%20es%20la%20acci%C3%B3n,al%20conocimiento%20en%20varios%20sentidos

 

FERNANDA JACINTO

ARTISTA Y PSICÓLOGA

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